¿QUÉ TE IMPULSA EN TU VESTUARIO MENTAL?

Pistoletazo de salida para el último impulso escolar, político y profesional de 2010 antes de la próxima parada llamada ¡Navidades!. Todavía con el color playero, el buen humor de las recientes vacaciones y algunos con la resignación de que se acaba lo bueno (porqué?) comenzamos a dar los primeros pasos con el vestuario mental que cada uno tenga ante el desafiante último cuatrimestre. ¿Cómo crees que es tu vestuario mental?, ¿Qué tiene de formal tu vestuario mental?, ¿Cuánto espacio para probar nuevas experiencias?, ¿Y cuanto de aprendedor?, ¿Quien escoge por ti en tu vestuario?, ¿Qué tratas de esconder?.

Hoy, ahora es el momento de impulsar desde la amplitud de tu vestuario mental todo lo que no te atreves a realizar por miedo, bloqueos o creencia de que no tienes talento y que si te has atrevido espontáneamente durante el verano a sacarlo a pasear por tu mente (sea lo que sea). Algunos de mis coachees buscan re-ordenar y alinear sus deseos y sueños más profundos para ponerlos en la práctica antes de que tu vestuario mental acabe de nuevo en lavandería y secado (siempre queda la siguiente estación para rescatarlos).

Hablo de entrar definitivamente en tu esencia más auténtica (el placer del juego y el libre espíritu por ejemplo) y conectarlo con coraje, positividad y entusiasmo en tu acción real (no hay otro valor, así que no te escondas) alzando la vista para ver, sentir y expresar más allá de donde lo hayas hecho hasta ahora (trabajo, familia, amigos, hobbies, alimentación, etc).

Sé que no encuentras apenas apoyos, que te cuesta impulsarte, que ves frenos por todos sitios (¿hasta que punto te dejas influir por lo que dicen los demás?) sin embargo esto que tú crees ver es tan sólo un punto de vista más que resta valor a tú confianza, parte importantísima de tú vestuario mental. Nos empeñamos en maltratar a veces nuestra confianza poniendo exceso de dudas en nosotros mismos y por tanto en los demás (Revisarse es bueno aunque sin parálisis por exceso de análisis).

Siempre digo que en el vestuario mental no has de buscar y profundizar en las razones de lo que haces, sino ponerle conciencia a qué o quién eres en lo que decides hacer y haces cada día. Hablo de saber discernir y de ampliar tus perspectivas frente al mismo comportamiento rutinario que te impide crecer (como si te vistieras sólo de negro o amarillo todos los días, imaginas?)

A mi me impulsa cada día las ganas de aprender, de disfrutar con lo que hago y vivir con pasión cada relación personal o profesional. Te puedo asegurar que en lo que tú llamas "fuera" hay grandes oportunidades de trabajo, relaciones y aún más importante amor. Entonces, ¿Qué te impulsa en tu vestuario mental?, ¿Qué te impide darle color a tu vestuario?