miércoles, 21 de marzo de 2012

¿QUÉ SABES DE TU NIÑO INTERIOR?


¿Qué sabes de tu niño interior?. Mi invitación a preguntarte es porque muchas veces conoces tus emociones como adulto aunque quizá no tanto cómo reclama tú niño interior. Yo sigo descubriendo y sorprendiéndome en este permanente trabajo de riesgo e imaginación.

Cierto que antes hay que sacudirse muchas ideas preconcebidas porque el ego aprende una personalidad aún en la más absoluta dificultad para sobrevivir. Ego que se defiende y actúa desde un personaje, bien para no sufrir o sencillamente para escapar hacia delante cuando el niño interior es inocente ¿Lo reconoces?

Y a veces no basta con la intención de rescatar a tú niño interior, hay que hacer una búsqueda interior enfrentándote al ridículo y a tú locura. Es dejar caer al adulto cabezón, a sus ideas, porque a medida que investigas o conversas con él tu percepción cambia.

Sabemos muchos capítulos de la vida del adulto, sin embargo el de cuidar y mimar al niño interior mira si lo tienes suspendido, porque pocas veces se escucha al corazón. Fracasa como adulto y mira desde la sombra quien queda dentro de ti y sentirás lo bello de la vulnerabilidad. ¿Has mirado si hay o ha habido un personaje exterior?

Yo en mi trabajo personal con mi niño interior a través de mi formación en clown terapéutico, tengo un niño triste y reconozco en él una necesidad de escucharlo y darle mimos en vez de dejarlo abandonado y reclamar la atención a través del adulto caprichoso. Mejor conocerlo, expresarlo y cuidarlo

Por supuesto tienes derecho a tener vergüenza, especialmente cuando no hay un trabajo personal hecho. Creo que es un error tapar o restar a tu niño interior. Toma la iniciativa de mostrarlo, yo creo que tiene mucho que decirte y tú que escuchar. Partir de ahí es un buen inicio.

No es necesario que lo entiendas del todo, pon foco en qué información te llega y respira, al fin y al cabo todos estamos hechos del mismo material. Mirar hacia la niñez es como mirar al futuro ambos se ensanchan en tu mente y corazón de esperanza y luz ante la estrechez del hoy.

El niño interior siempre está y estará ahí, es indudable. Por eso has de trabajar intensamente hasta conectar con él en lo que yo llamo "el encuentro". Allí descubrirás que hay un espacio para volver a encontrarte con tus sentimientos más genuinos. ¿lo has intentado?

Intenta que tú verdad esté visible en el presente más absoluto, sólo así los demás te mostrarán mayor afecto que si tratas de esconderla. Vive un poco menos planificado no tanto desde la ideas sino desde la posibilidad de que seas sorprendido, quizá te sorprendas con tu espontaneidad.

Tampoco te recomiendo que entres a psicoanalizarte para complicarte sino más a estar en tu percepción, en aflojar lo que tanto te aprieta. Como dijo un profesor de clown hace poco en clase, ¡Más vale estar cabreado que estar muerto!

Ahora marca un redoble en tu corazón y dile a tu niño interior que quieres escucharle.

Me gustaría que dejarás tu comentario ahora para el intercambio de ideas. ¡Es otra forma de crecer!

28 comentarios:

  1. Buenos días Diego, intento ser niño a diario, ese niño me enseña a disfrutar de lo bueno, a mirar a los ojos, a sonreir, a no enfadarme con lo no relevante; me enseña a ser maduro y sobre todo a saber mirar hacia adelante.

    Un placer. Buen día !!

    Yván Conejero @bolyvan

    ResponderEliminar
  2. Gracias Iván por tu estupenda afluencia al blog.

    El niño interior es un gran desconocido para muchos que no recuerdan su infancia y nos sabes como me alegro que estés conectado con él.

    Mirar a los ojos y a tú público es un gran logro. Felicidades!

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muy interesante artículo Diego,

      Ojalá todos los seres humanos fueran conscientes de lo importante que es poder rescatar a ese "pequeño ser olvidado" que hemos llevado dentro por tanto tiempo. Llevo unos años en un proceso de autodescubrimiento y este hermoso y maravilloso viaje me ha llevado a conocerme a mi misma y por supuesto a "rescatar" a mi preciosa y estupenda niña interior. Hoy ella sabe que no esta sola, ni abandonada porque me tiene a mi y siempre estaremos juntas en este camino!

      Es un gran regalo poder experimentarlo! Os lo recomiendo...

      Un fuerte abrazo,

      Claudia

      Eliminar
    2. Gracias Claudia por tu visita y dejar huella con tu niña interior.

      Yo creo que todos somos más o menos conscientes, otra cosa es si la coraza construida es tan pesada y gruesa que impide salir de ella.

      Para estos casos utilizo que CREER es CREAR. La solución está dentro de cada uno!

      Un abrazo.

      Eliminar
  3. Es un placer Diego. Seguiré haciéndolo. Quiero aprender y enseñar, y escuchar más que hablar.

    Puedes seguirme en twitter en @bolyvan y estar al corriente de todos mis artículos en diferentes blogs.

    Un saludo.

    Yván Conejero

    ResponderEliminar
  4. Yo creo que la mayoría de nosotros quisiéramos ser niños eternamente, esa época en que no teníamos casi ninguna responsabilidad, que jugábamos continuamente, que aprendíamos y no a la fuerza...Lo de ser adultos es una obligación de la madre naturaleza, no se puede volver atrás, aunque a veces podamos IMITAR al niño que un día fuimos, pero según en que momentos podemos caer en el ridículo o la locura.
    Un abrazo
    JR+

    ResponderEliminar
  5. Buenos días JR, gracias por dejar tu comentario.

    Si te das cuenta has dejado una opinión mayestática (en nombre de todos) que puede que refleje lo alejado que se está del interior, de tu esencia emocional.

    Trato de sentirme como adulto lo más vivo y coherente posible al tiempo que trato de compartir la misma curiosidad y plenitud de un niño.

    Te aseguro que hay un diálogo maravilloso cuando conectas con el niño interior.

    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  6. Gracias por tu reflexión y por recordarnos que tenemos un niño interior que nos permite disfrutar, crear, jugar, investigar y creer que todo es posible!!!
    Un abrazo
    Hermínia Gomà

    ResponderEliminar
  7. Gracias Hermínia por tu visita y comentario positivo.

    El niño interior es un gran aliado que bien conocido y relacionado contigo puede traer muchas y buenas noticias. De cada uno depende hacerlo así!

    ¿Seguimos jugando?

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. He tenido que leer varias veces tu reflexión para poder interiorizar algo tan olvidado para mi. Precisamente todo lo contrario a lo que llevo haciendo estos últimos años, callando mis miedos e inseguridades para sentirme más fuerte o creerme más fuerte.

    Es cierto que nos merecemos sentirnos vulnerables, sin embargo, ¡Cómo nos cuesta!

    Gracias por tus compartir tus experiencias y pensamientos, seguiré reflexionando en ello.

    ¡Feliz de haberme encontrado este blog!

    ResponderEliminar
  9. Gracias Carolina por tu primera visita que ojalá sean más.

    En efecto hay una "mordaza social" que impide a muchas personas desaprender de sus miedos para ponerlos al servicio de la autenticidad incluyendo la vulnerabilidad.

    Intenta expresarte en primera persona. Hacerlo desde el plural mayestático (tienes un post sobre esto) resta responsabilidad individual a tus actos.

    Un abrazo grande y feliz de que hayas llegado. Bienvenida!

    ResponderEliminar
  10. A mi me costó conectar con mi naturaleza nada más y nada menos que...( redoble de tambor) 18 años!!! Supongo que hablar de niño interior y naturaleza es hablar más o menos de los mismo. La vida cambia radicalmente cuando te alineas con quien realmente eres. Enhorabuena por tu blog, Diego. Aprendo mucho de él :)

    ResponderEliminar
  11. Estimado Alberto gracias por tu nueva visita.

    Nunca es demasiado tarde para re-conectarse con tu esencia. La naturaleza del niño es estar en otro patrón de conducta perfectamente compatible con ser adulto.

    En efecto el cambio viene en el momento en que decides ampliar tus perspectivas a mundos más curiosos, más vulnerables, más libres y por tanto más real.

    Nunca me caso de decir que no hay que pedir disculpas por sentir o por expresar como te sientes.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  12. Buenas soy Cristo y tengo 23 años me gustaria actuar un poco mas en la parte de adulto, ya que en mi experiencia personal he tenido conflictos y creo que ver la vida de esta forma es una de las mas gratificantes que he encontrado (y dolorosa) pero en mi caso merece la pena crecer cada dia.
    Quisiera explicar que desde mi he visto que en mi vida siempre mi niño me ha controlado, me gustaria saber si alguien como persona de adulto puede darme algun consejo...Muchas veces actuo como padre-adulto.Es decir no se que rol o estado del yo me encuentro.Gracias a todos los que me lean y un saludo a la creadora de la pagina.

    ResponderEliminar
  13. Hola Cristo, gracias por tu visita al blog y exponer tu caso.

    Según cuentas te recomiendo que leas este post. Creo que te puede dar pistas de cómo el control mental puede gestionarse o al menos intentarlo. http://diegomartosemprendedor.blogspot.com.es/2010/10/el-saboteador-cabezon.html

    Te deseo lo mejor y por supuesto aquí seguiré escribiendo.

    ResponderEliminar
  14. Gracias Diego por este post que tanto me conecta con mi niña. Mi niña interior es demandante y quiere que le den mucho cariño, amor, abrazos...; se asusta cuando la gritan, cuando la abandonan y se siente muy muy sola.
    Un abrazo,

    Esther

    ResponderEliminar
  15. Gracias Esther por tu visita y tu comentario.

    Me alegra que te conectes con ella y que sepas como funciona en tu vida.

    Sólo te diré que la sigas cuidando y que sigas mirando como te reclama en tu vida de adulto. Ni que decir cuando está asustada.

    Mira a ver 2 o 3 características que te sobran como adulto. Quizá la niña curiosa aproveche y recupere su espacio aún más.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Hola Diego,

    Me ha gustado mucho tu artículo, me siento muy identificada con el tema. Llevo muchos meses con una lucha interna, siento que tengo una niña interior q me recuerda q la vida q llevo no es la q quiero, que salga de mi actual trabajo y busque aquello que relamente me parece interesante, q tome riesgos. Pero entonces me digo que hay q ser adulta y aceptar q tengo q mantener este puesto de trabajo, q con mis pocos ahorros me puedo mantener un año, podría estudiar un curso para especializarme, pero y luego?Aquí en España las cosas están muy mal,todo el día escuchando a mi alrededor o viendo en los periódicos noticias deprimentes; y fuera no me quiero ir. No sé como resolver este dilema, no solo el que hacer, incluso tengo dudas de cómo soy.

    Que me aconsejarías?Muchas gracias.

    Carla

    ResponderEliminar
  17. Buenos días Carla, gracias por dejar tu comentario.

    Yo también me esfuerzo (Carla atención con la palabra lucha) por escuchar al niño interior y darle juego aunque el adulto censor se ocupe de maniatarlo.

    Estoy seguro que podrás sacar adelante a tu niña interior y a ti misma con atrevimiento, sólo tienes que decidirlo y hacerlo (sé que no es fácil desde la cabezota)

    Lo mejor es una conversación con alguien que SÓLO vaya a escucharte y te permita encontrar los primeros pasos por arriesgados que sean.

    Yo encantado de hacer de espejo mágico. Sólo tienes que escribirme a mi correo diegomartos16@gmail.com

    Un abrazo grande!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por tu respuesta Diego.
      Ahora me voy unos días de vacaciones pero a la vuelta te escribo.

      Agradezco mucho que hayan personas como tú que nos aportéis estos artículos para aquellos que los necesitamos.

      Un abrazo


      Carla

      Eliminar
    2. Pues felices vacaciones y cuando quieras!

      Eliminar
  18. Hola, yo soy estudiante de clown y me ha encantado esta entrada, de antemano me servirá mucho para ponerla en practica, algunas cosas me las ha dicho mi profesor de clown, al igual que tu sueno tener un niño interior triste, pero tengo un comentario que si me pudiera ayudar a aclararlo seria genial, me da pena o vergüenza hacer el ridículo ¿Tienes Algún consejo para soltarme mas? Para poder sentir menos pena al hacer el clown? Aun no logro sentirme la mas idiota sin tener penilla

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Daniela, gracias por pasarte y dejar tu comentario.

      Me alegro que te hayas decidido a hacer clown como trabajo personal, te vendrá muy bien. Sobre tu pregunta te invito a que des nano-pasos en lugares seguros para ir tomando confianza y conciencia.

      En particular ve a una frutería, a un mercado y sueltate la melena sin sentir tanta pena!

      Un beso en la nariz!

      Eliminar
  19. Los Kahunas hawaianos llaman al niño interior Unihipili, y viene a corresponder con nuestro subconsciente. Es una maravillosa sorpresa para mi descubrir este acercamiento diferente hacia el niño interior que nos propones. Las posibilidades del clown y del teatro me parecen apasionantes escuchando tus perspectivas.

    Gracias, Diego

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Mauro, para mi ha sido una grata sorpresa ver tu comentario y saber que el niño interior se llama así para los Kahunas Hawaianos.

      El niño interior es un espacio muy especial en el adulto por abrir totalmente una ventana a la libertad. Sólo cuando el adulto lo descubre, disfruta y lo vive puede repetir una y otra vez!

      Hagamos posible que muchos más adultos vivan su niño interior.

      Un abrazo!

      Eliminar
  20. Pues yo soy estudiante universitaria y a pesar de ser seria y responsable,no me avergüenza decir que soy como una niña mayor. Creo que lo mejor que le puede pasar a una persona es vivir con la sabiduría y experiencia que te da la edad y tener un corazón de niño lleno de ilusión ,esperanza e inocencia que se van perdiendo con la edad. Por eso mi deseo es llegar a ser adulta pero con corazón de niña.

    En realidad creo que los niños son los únicos que saben apreciar la vida porque son los que se fijan e ilusionan con cada pequeño detalle. jejejej

    ResponderEliminar
  21. . COMO DESARROLLAR INTELIGENCIA ESPIRITUAL
    EN LA CONDUCCION DIARIA

    Cada señalización luminosa es un acto de conciencia

    Ejemplo:

    Ceder el paso a un peatón.

    Ceder el paso a un vehículo en su incorporación.

    Poner un intermitente

    Cada vez que cedes el paso a un peatón

    o persona en la conducción estas haciendo un acto de conciencia.


    Imagina los que te pierdes en cada trayecto del día.


    Trabaja tu inteligencia para desarrollar conciencia.


    Atentamente:
    Joaquin Gorreta 55 años

    ResponderEliminar