lunes, 2 de abril de 2012

AYUDA Y SERÁS AYUDADO

De antemano doy gracias a Paola, Tudi y Jesús por la inspiración del título y todo lo que sugiere en adelante. Me siento con energía y decisión para escribir desde esta maravillosa perspectiva que supone ayudar.

En mi opinión entiendo la ayuda como un espacio colaborativo honesto, generoso e inteligente donde crecer como persona. No hay nada como la satisfacción al ver la cara de felicidad de una persona cuando le prestas ayuda, cuando la sacas de un apuro y comienza a ver la luz al final del túnel.

Saber dar ayuda: En ciertos momentos de mi vida ha existido la necesidad impagable de ayudar a alguien. Hay un sentimiento interior que me hace sentir bien hasta el punto de correr el riesgo de entrar en estupidez. Ayudar es entender las reglas maestras de la vida incluidas las de fracasar en la falta de precisión de lo que es y no es ayuda.

Muchos se enfocan mal cuando ayudan sólo hacia el exterior como única vía. Conozco algunas personas que han sido devoradas en su tiempo pasando de la utilidad a la de sentirse utilizado. El tiempo es un bien precioso, la actitud de cómo lo regalas más aún.

Esto va en conexión con el post anterior sobre las personas tóxicas. Muchos dejan sus propias responsabilidades creyendo que ayudando se van a sentir mejor, error. Ayudar en un apuro es lo mínimo, ser el comodín de la llamada o del público, ni hablar!

Saber pedir ayuda: No sé al final que es más fácil o difícil, pero si tengo claro que cuando me ha tocado el turno de hacerlo me ha costado tragar sapos. Es una mezcla de vergüenza y miedo a ser rechazado ante la petición. En esos momentos la vulnerabilidad hace estragos al discurso.

Por experiencia no hay nada peor que la persona soberbia que dice no necesitar ayuda cuando lo estás viendo a 100kms. Bien está el espíritu de superación, mal la insolencia de rechazar que no se necesita ayuda. Quizá algunos buscan conseguir el éxito que a veces es un fracaso en si mismo.

Por ello comunícate, da pasos honestos y no te relaciones de forma extrema. Ni como el que nunca tiene bastante para satisfacer su ego, ni tampoco como el que hace caso omiso de sí mismo dejando de lado su propia dignidad. Mi mensaje para estas personas es "Ayúdame a ayudarte".

Por último he localizado un vídeo que espero nos empuje aún más en la generosidad que supone ayudar a los demás desde el primer impulso del corazón. ¿Cómo podemos ir juntos en el mismo tren?


Me gustaría que dejarás tu comentario ahora para el intercambio de ideas. ¡Es otra forma de crecer!


14 comentarios:

  1. Buenos días Diego, maravillosos artículo y vídeo impregnados con un delicioso tono de cordialidad y de intentar hacernos mejor cada día. A mi personalmente me viene mucha gente a pedir ayuda para según que temas; he aprendido que a veces la mejor ayuda es apartarte, no decir nada; para que la persona que te pida ayuda sepa también ayudarse a si misma. Y me pasa lo que a tí, hay personas con las que que no haces más que decirles, aconsejarles ayudarles a que encuentren un camino distinto al que llevan... pero ellos ni caso; siempre les digo lo mismo; la primera persona que os debe ayudar sois vosotros mismos, si os concienciais de ello; el siguiente paso lo daré yo.

    Un placer leerte, y que esta semana sea la menos santa de todas las que nos quedan por delante.

    Yván Conejero

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    1. Buenos días Yván gracias por tu nueva visita y comentario.

      No sé tú pero creo que vivimos en permanente conexión y desconexión, lo que produce una congestión de decisiones imposibles de satisfacer a todos el mundo.

      La responsabilidad personal y colectiva no se ha guiado por modelos sino por educación personal (casi siempre en propia experiencia). Por ello, hagamos posible desde el corazón el tener suficiente fuerza personal como para ayudar y ser ayudado.

      En ambos caminos nos encontraremos!

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    2. La palabra, educación, Diego, es la clave. Si señor; por eso mismo debemos educar desde temprana edad; o desde avanzada, pero siempre aprender y recepcionar aprendizaje; y muchísima empatía; tan necesaria como vital para estos momentos.

      Un abrazo.

      Yván Conejero

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    3. Gracias Yván. Adelante con la vitalidad!

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    4. Hola Diego!
      Me parece muy importante que alguien se dedique a rescatar de lo más profundo cositas como estas.............es la clave del cambio y de la felicidad...........algo tan simple como un pequeño detalle...........cambia muchas cosas, un pequeño gesto........si todos estuvieramos conectados a esa emisora el mundo sería mas amable, más humano, menos raro.........como dice la canción. En cuanto a lo que menciona Yvan, podría añadir que respecto a la educación o el acto de educar, siempre va en dos direcciones, la de aprender y la de enseñar. Sería estupendo que fuera obligatorio que al igual que los niños/as tienen que ir al cole durante algunos años, los padres/madres también tuvieran que ir a una escuela (o la misma, a diferentes horas claro está) para aprender a educar a sus hijos/as. Eso si que cambiaría el mundo. Un saludo y a seguir en la ayuda.

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  2. Hola, gracias por tu visita!


    Completamente de acuerdo en tu enfoque y sentido de vida. Sólo nos falta mejorar en las expectativas y exigencia con la que nos relacionamos.

    A veces los resultados nos llevan a una necesidad artificial en las relaciones y ni que decir en la educación.

    Yo sé que desde la creatividad y la flexibilidad, la conexión personal crece y se asienta en valores más solidarios.

    Un abrazo

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  3. Desde hace un tiempo estoy siguiendo tu blog y sus contenidos me parecen, no sólo interesantes, sino también enriquecedores.
    Estos motivos son los que me han llevado a colocarlo en mi página web como “Blog Amigo”. Sin embargo, me gustaría que me dijeses si hay algún problema en que lo haya hecho y si preferirías que lo retirase. En caso de ser así, por favor, dímelo, y lo retiraré inmediatamente.
    Te envío el enlace de nuestra página web para que puedas ver quiénes somos, cuál es nuestra filosofía, nuestras motivaciones y nuestros intereses:
    http://www.elfactorhumanoburgos.com/blog/

    Recibe un cordial saludo,
    Mónica

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    1. Estimada Mónica, que buena noticia!

      Para ser coherente he hecho lo mismo y con mucho gusto. Además Te he seguido en todas tus redes sociales. Contacto total!

      Un abrazo muy grande y feliz de esta buena noticia.

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  4. Alberto de Enrique5 de abril de 2012, 10:56

    Muchas gracias Diego por compartir este contenido gratificante y efectivo para nuestro crecimiento interior. Doblemente gracias, por que me siento completamente identificado, pues uno de mis valores es el sentido de la contribución y de la ayuda, pues creo firmemente en la evolución y en desarrollo practicando la misma. El video viene a ilustrar brillantemente, como podemos generar una sociedad basada en el "yo interior" , transcendiendo a lo meramente material para llegar a lo emocional y espiritual. Creo que esto es lo que se llama una sociedad sostenible, pero sostenible desde nuestro yo como integrante de una comunidad, es decir, lo individual o lo personal al servicio de los demás.
    Un abrazo.
    Alberto de Enrique.

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    1. Buenos días Alberto, gracias por tu visita llena de buena energía!

      Yo también soy practicante de que una sociedad que trasciende lo material puede encontrar su "espacio emocional y espiritual" desarrollado. No hay porque eliminar nada, solo potenciar lo olvidado por el estrés.

      Necesitamos trabajar mucho más la empatía en saber pedir ayuda y ayudar. La comunicación y el orgullo muchas veces se llevan fatal.

      Un abrazo.

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  5. Qué de energía positiva podemos regalar.!!!.., todos tenemos algo valioso que ofrecer en el momento menos esperado y a las personas que no te imaginas. Yo, que siempre lucho por subir mi autoestima, compruebo y disfruto mucho la gran energía que genero cuando escucho mirando a los ojos a quien está hundido, le abrazo sin que me lo pida o simplemente devuelvo una sonrisa cordial a un desconocido/a creando un momento de complicidad e intercambio de energías, es un bálsamo para la felicidad interior. Yo siento muchos días dentro de mí una energía que me desborda, creo que es como un amor inmenso al universo y a mí?? y me encanta regalar parte de ella.
    A veces esta energía la pierdo, caigo en espiral, siento que las circunstancias me la roban, pero de repente alguien me sonríe.., o me sorprenden con una frase especial o un desconocido me ofrece ayuda... y vuelvo a conectar con esa energía positiva que fluye y ....me siento plena de nuevo.
    Hay mucha gente que no la ha descubierto todavía o incluso posiblemente nunca lo hará, es de estas personas de quien hay que protegerse por que nunca dan, sólo quitan.
    Precioso video Diego,, y además con temilla Reggae de fondo...
    yo quiero vivir en ese planeta

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  6. Hola Ariadne, me alegra tu visita!

    A mi me encanta que me sorprendan positivamente. Cuando recibo buenas noticias de clientes, colaboradores y por supuesto familia/amigos me da un buen subidón de energía para así regalarla a los demás.

    Como dice un amigo vincular la autoestima al éxito en la vida es una artimaña que utiliza el sistema para tenerte explotado y pendiente de él. Necesitamos abrazar el fracaso para dar un paso hacia la emancipación.

    Sólo desde ahí podemos compartir la energía y valorarla a fondo y sin viajes arriba y abajo.

    Me gusta que tengas tanta energía para regalar, a ver si cuando nos veamos la veo en acción. Un abrazo grande y energético.

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  7. Gracias Diego. Sigo desde hace poco tus comentarios que me parecen
    interesantísimos. Son reconfortantes en ésta sociedad que hemos creado y que nos hace ver cosas en ese video, como algo extraordinario. Quizá hemos perdido el norte centrándonos cada uno
    en nuestras cosas, sin darnos cuenta de la brevedad del Ser.
    Puedes estar seguro del éxito de tu blog. Conozco amigas que lo leen y lo comentamos (eso sí, teniendo que investigar un poquito).
    Es más fácil hablar de temas superficiales que a nada comprometen.
    Un saludo.
    Mª Riva

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    1. Gracias a ti Mª Riva por tu visita (por vuestras visitas)

      Creo que es importante ver y sentir las cosas como extraordinarias. Nunca una flor o una puesta de sol será igual cada día.

      No creo que nos hayamos perdido más bien necesitamos saber lo que nos pasa para ponerle remedio, a ser posible de forma duradera. Ahora vamos mucho más deprisa que antes y necesitamos hallar la forma de saber ir al fondo sin ser superficiales.

      Lo estamos consiguiendo porque yo veo cada vez menos personas quejarse, ojalá!

      Un saludo.

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